Jaime se fue a Ucrania con la ayuda de la Fundación Altius, condujo por turnos con un amigo una furgoneta durante 31 horas desde España hasta la ciudad de Leópolis. Iban cargados de material humanitario.
Su idea era cruzar la frontera para entregarle en mano la mercancía a un sacerdote local con la ayuda del Ejército. Aunque cuando llegaron se encontraron lo peor. Habían bombardeado la ciudad...