Las catacumbas de Domitilla, son las catacumbas más grandes de Roma. Tienen 12 kilómetros de longitud y más de 70 frescos que han sido restaurados con láser para revelar su auténtica belleza.
El terreno de las catacumbas perteneció a una mujer llamada Flavia Domitilla, miembro de la familia imperial y sobrina de Domiciano. El emperador la deportó como castigo por sus simpatías hacia el cristianismo, pero ella antes de marcharse regaló el terreno para enterrar a los cristianos...