- PAPA FRANCISCO:
"Jesús no era un filántropo que se ocupaba de los sufrimientos y las enfermedades humanas: era y es mucho más. En Él no sólo hay bondad: hay salvación, y no una salvación esporádica -que me salva de una enfermedad o de un momento de desánimo- sino la salvación total, la mesiánica, la que da esperanza en la victoria definitiva de la vida sobre la muerte".