En el ángelus del domingo, el Papa reflexionó sobre el episodio del Evangelio en el que Jesús pregunta a los apóstoles: “Vosotros, ¿quién decís que soy yo?”. El papa Francisco dijo que esta pregunta no admite respuestas preparadas porque hay que responder con la propia vida. El Papa regaló a cada peregrino un crucifijo. En total se distribuyeron 40 mil crucifijos.