En su audiencia general desde el Cortile di San Damaso, el Papa dijo que para superar la crisis generada por la pandemia “deberíamos buscar entre todos, el bien común. Pero vemos que algunos, lamentablemente, lo que buscan es aprovecharse para obtener ventajas económicas o políticas”.
Dijo que “la respuesta cristiana a esta situación es el amor y la búsqueda del bien común”.
Explicó que no se trata de amar sólo a quien me ama; “sino a todos, incluso a los que no me conocen, a los extranjeros, o a quienes me han hecho sufrir”. El amor verdadero también se extiende a las relaciones sociales, culturales, económicas y políticas.
Francisco enfatizó que “una sociedad sana es la que se hace cargo de la salud de todos”.