Los habitantes de Etiopía sufren enormes periodos de sequía que se convierten en temporadas sin apenas alimentos. Esta carestía deja a cientos de niños sin poder si quiera desayunar antes de caminar durante más de dos horas para llegar al colegio.
El sacerdote John Kozar de la "Catholic Near East Welfare Association” fue hasta Etiopía para estar cerca de los más pequeños y de los ancianos.