Esta es la última vez que los restos mortales del cardenal Josef Beran reposarán junto a los papas en la basílica de San Pedro.
Vuelve a casa, a la República Checa. Josef Beran sobrevivió a dos campos de concentración nazis y a 20 años de persecución comunista en su país donde permaneció 12 en prisión. Pablo VI lo creó cardenal y desde 1965 vivió en Roma, en el exilio porque el gobierno checoslovaco lo expulsó del país. Ni siquiera cuando murió en 1969 aceptaron que el cuerpo volviera a Praga.