Parecía ser una cosa puntual…
…pero finalmente se convirtió en una costumbre.
Hasta en 13 ocasiones, Victoria ofreció al Papa, en sus audiencias, e incluso en la basílica de Santa María la Mayor, la típica bebida argentina: el mate.
El papa tiene como costumbre encomendar sus visitas apostólicas a la patrona de Roma. Por eso, siempre se acerca a Santa María la Mayor tanto a la ida como a la vuelta de sus viajes. Victoria se ha encontrado allí con el pontífice en varias ocasiones.