El pasado mes de febrero, el Camino Sinodal Alemán aprobó una serie propuestas que difícilmente encajan en la doctrina católica.
Una de ellas es la “reevaluación magisterial de la homosexualidad”, con la bendición de las parejas de un mismo sexo que ya numerosos párrocos alemanes han puesto en práctica, o la aceptación de candidatos homosexuales al sacerdocio, por poner algunos ejemplos.
Otra medida aprobada en febrero de 2022 se encuadra en el ámbito teológico, pero también tiene consecuencias prácticas. En la Iglesia Católica siempre se han considerado fuentes de la Revelación la Biblia, la tradición y el magisterio. El Sínodo de Alemania incluye tres más: la ciencia teológica, los signos de los tiempos y el sentir del Pueblo de Dios.
Por eso ha sido tan necesaria la nota del Vaticano.