El observatorio del Vaticano, comúnmente llamado “Specola” guarda recuerdos e historias únicas como la de las 4 religiosas que estudiaron el cielo. También conservan fragmentos de meteoritos y recuerdos de los papas que pasaron por aquí, como Pablo VI en el día en el que el hombre llegó a la Luna. “El observatorio del Vaticano fue inaugurado en 1891 por el Papa León XIII. Se lo sugirió el padre Francesco Denza, un astrónomo. El objetivo era demostrar al mundo que la Iglesia no estaba contra la ciencia”.