El papa Francisco viajará el martes al norte de Italia para rezar ante las tumbas de dos sacerdotes poco comprendidos en su tiempo Primo Mazzolari y Lorenzo Milani. El primero fue capellán militar durante la I Guerra Mundial. La experiencia lo marcó profundamente y años después no temió en denunciar con energía el fascismo de Mussolini. Juan XXIII y Pablo VI reconocieron la valía del sacerdote. Sus predicaciones eran directas y enérgicas. Falleció en 1959.Ambos son considerados como ejemplos de la doctrina social de la Iglesia y precursores del Concilio Vaticano II.