Durante la audiencia de hoy miércoles, el papa Francisco saludó a una delegación interreligiosa de Irak. Les pidió que sigan trabajando para construir paz y prosperidad a través de reconciliación y armonía entre grupos étnicos y religiosos. Luego denunció la situación de los 400 mil civiles atrapados en Mosul. Al menos 200 murieron el jueves pasado durante un bombardeo de la coalición internacional antiyihadista.