El Papa Francisco se ha reunido el pasado lunes en el Vaticano con dirigentes y personal de la Policía de Tránsito y Ferroviaria italiana.
Francisco les invitó a sensibilizar a las personas de las graves consecuencias que supone no prestar atención cuando se conduce. Dijo que no bastan las multas de tráfico, sino que hay que mejorar la educación vial de la población.
Aunque el Papa les agradeció a todos su trabajo, les pidió que sean misericordiosos con los infractores y que hagan uso de su poder sin recurrir en ningún caso a la violencia.