Al terminar la audiencia general del pasado miércoles, el Papa ha querido sacarse una foto con estos niños italianos. Son de una escuela de una localidad llamada Montalto Uffugo y fueron invitados por Francisco para estar en el primer encuentro tras las vacaciones.
Cada niño escribió una redacción escolar y decidieron enviar todos los trabajos al Papa. Se sorprendieron cuando les llegó una respuesta y una invitación a encontrarlo en el Vaticano.
Las maestras organizaron el viaje a Roma para las familias y los niños, que quedaron felices con la invitación. Y pese a su corta edad, son conscientes de que han vivido un momento histórico.