En el día de la Inmaculada Concepción, el Papa rezó una oración especial ante la columna y estatua de la Virgen de la plaza de España en Roma.
“Concédenos también a nosotros, por su intercesión, acercarnos a ti con santidad y pureza de espíritu”. El Papa pidió a la Virgen que bendijera a los cristianos para que tuvieran la fuerza suficiente para combatir los problemas de hoy.