El Valle de la Bekaa es el punto del Líbano que más refugiados sirios acoge, un millón de los 5 que han huido de Siria. Al mismo tiempo, Líbano sigue recuperándose de más de 15 años de guerra civil y de las secuelas de su guerra de 2006 contra Israel. Pese a todo, la generosidad de los libaneses ha hecho posible que los sirios encuentren un refugio seguro en centros como este de la Orden de Malta. Mientras que otros países con más recursos están limitando su ayuda o cerrando las puertas a estos refugiados, Líbano, un pequeño país con una economía de posguerra los acoge e intenta ofrecerles las condiciones de vida más dignas posibles.