FATIN MARWAN PUTRUS: “Perdonaremos porque somos hijos de Dios y Él nos perdona todos los días. Y esto es lo que aprendimos de Él: amar porque Él amó”.
Son los pocos cristianos que quedan en Irak y sienten el peso de la responsabilidad. ¿Si ellos no viven su fe con obras quién lo hará?
La visita de Francisco a Qaraqosh es un paso en esa dirección: hacer de la Llanura de Nínve y de todo Irak un lugar de paz y convivencia armónica.