Desde que San Juan Pablo II, hace 35 años, hizo poner el pesebre en la plaza de San Pedro, cada año empiezan por estas fechas los preparativos, para poder inaugurarlo la víspera de la Inmaculada Concepción. Este año es un regalo que viene de Benevento, Italia.
La imagen del Niño Jesús no se colocará hasta el 25 de diciembre.