El Vaticano confirmó que el papa estaba con bronquitis y que, por eso, sus encuentros se trasladaban del palacio apostólico a Casa Santa Marta.
Pero a pesar de estar enfermo, su actividad no ha cesado. No solo no ha cancelado su agenda, sino que no ha parado de tener encuentros: solo el 6 de febrero en Santa Marta tuvo ocho.