A pocos días de la primera Navidad de la pandemia, el Papa habló incluso del valor de las restricciones, que se endurecerán en muchos países.
La propuesta del papa Francisco es no gastar energías pensando en lo que no se podrá hacer..., y dedicarlas a buscar qué se puede hacer para ayudar a quienes tenemos cerca.
"Que nos ayude también, esta dificultad, a purificar el modo de vivir la Navidad, de festejar, saliendo del consumismo. Que sea más religiosa, más auténtica, más real"