Han pasado 77 años desde que la bomba atómica cayó sobre la ciudad de Nagasaki (Japón), que dejó unos 39.000 muertos.
A lo largo de su papado, el Papa Francisco ha hablado en repetidas ocasiones sobre las consecuencias del uso de las armas nucleares. Ha criticado la acumulación de armas, calificándola de "lógica del miedo".
Recientemente, el Papa Francisco actualizó su postura sobre la moralidad de las armas nucleares. En su vuelo de regreso de Canadá, el Papa argumentó que la simple posesión de armas atómicas es inmoral.