Hannah es una joven que no practicaba mucho la fe pero que a través de una buena amistad de un curso de Biblia fue acercándose a Dios. Para Hannah lo más importante en su vida eran los estudios, sacar buenas notas, ser la mejor, la número uno. Al llegar a la universidad, Hannah de sobresalientes pasará a aprobados y esto supondrá para ella un golpe enorme. Descubre cómo Dios se hace el centro de su vida.