Domingo 6 de octubre de 2019
El Papa preside la Santa Misa de apertura del Sínodo para la Amazonía, condena las colonizaciones, pero también recuerda a todos los misioneros que han dado la vida en defensa de la región.

Esta mañana el Papa Francisco ha lanzado un mensaje claro y directo a todos los Obispos que participarán en el Sínodo para la Amazonía: “somos obispos porque hemos recibido un don de Dios” y sin embargo, muchas veces el don de Dios “no ha sido ofrecido sino impuesto” y “ha habido colonización en vez de evangelización”. Con estas palabras el Papa Francisco arrancaba su homilía durante la Santa Misa de apertura del Sínodo para la Amazonía en la Basílica de San Pedro en el Vaticano.

El Papa Francisco convocó este sínodo hace dos años y adelantó sus temas:

PAPA FRANCISCO (Noviembre de 2017):
“La finalidad de este encuentro será encontrar nuevos caminos para la evangelización de esa porción del Pueblo de Dios, especialmente de los indígenas, a menudo olvidados y sin perspectivas de un porvenir sereno, también a causa de la crisis de la Amazonía, pulmón de capital importancia de nuestro planeta”.

¿POR QUÉ LA AMAZONIA?
La Amazonia se extiende a lo largo de 8 millones de kilómetros cuadrados y 9 países.
Arroja en el Atlántico un 20% del agua dulce del planeta, y alberga del 10 al 15% de la biodiversidad terrestre.
Es la segunda zona más vulnerable del planeta, después del Ártico. Hoy la deforestación es de entre el 15 y el 20%. Si se supera una deforestación del 40% o el umbral de 4ºC de calentamiento, el Amazonas no se recuperará.
El Papa piensa que sus problemas tendrán repercusiones en todo el mundo.

EMERGENCIA HUMANA

En la cuenca del Amazonas viven unos 35 millones de personas. De ellos, 2,8 millones son indígenas. Pertenecen a 390 pueblos y suman 240 lenguas. Hay 137 pueblos indígenas viven en aislamiento voluntario.

Los indígenas llevan allí siglos y consideran que su tierra es sagrada, porque allí están enterrados sus antepasados.

Pero, no tienen ninguna protección jurídica, son considerados ciudadanos de segunda categoría.

Sus territorios son entregados a multinacionales, que los explotan impunemente, y les obligan a trabajar a menudo en condiciones muy desfavorables.

El Papa quiere combatir la globalización de la indiferencia y dar voz a quienes no la tienen. Propone dar a conocer la Amazonia para no quedar indiferentes al sufrimiento de sus habitantes.

EMERGENCIA ESPIRITUAL

La Amazonia es una de las zonas más remotas cultural y geográficamente.

Para que allí se consolide el cristianismo, hacen falta misioneros dispuestos a vivir en un entorno natural muy difícil, y con unas categorías culturales muy distintas.

Se trata de apreciar sus tradiciones y su cultura, y transmitir la fe sin imponerles otros esquemas culturales.

“NUEVOS MINISTERIOS”

El documento de trabajo hace propuestas muy originales:

1) Gobierno

Pide que el gobierno de las comunidades cristianas sea rotatorio y no esté en manos sólo de obispos y sacerdotes.

De este modo, también religiosos o laicos, hombres o mujeres, podrían guiar las comunidades.

CARD. CLÁUDIO HUMMES
Relator General del Sínodo
“Muchas comunidades son dirigidas por una o varias mujeres. Están allí, y quieren que esto se les reconozca.

“Que de alguna forma se institucionalice un poco el trabajo que hacen, para que su labor tenga más autoridad”.

2) Sacramentos

Propone buscar modos de facilitar el acceso a los sacramentos.

CARD. CLÁUDIO HUMMES
Relator General del Sínodo
“Hay falta de recursos humanos, sobre todo de ministros ordenados. Y por eso, entre el 70 y el 80% de las comunidades del interior del Amazonas brasileño tienen muy poca vida sacramental, aparte del bautismo y a veces del matrimonio”.

El documento de trabajo pide a los obispos que recuperen el espíritu de las primeras comunidades cristianas, que “respondía a sus necesidades creando los ministerios oportunos”. En concreto:

- Estudiar si es posible “la ordenación sacerdotal de personas ancianas, preferentemente indígenas, respetadas y aceptadas por su comunidad, aunque tengan ya una familia constituida y estable, con la finalidad de asegurar los Sacramentos que acompañen y sostengan la vida cristiana”.

- Identificar qué “ministerio oficial que puede ser conferido a la mujer”, por su papel central en la Iglesia amazónica. Se trata de mayor presencia en la formación de los otros cristianos; y que sean consultadas y participen en las tomas de decisiones.

En paralelo, el sínodo analizará otras zonas con características similares al Amazonas, como la Cuenca del río Congo y áreas remotas de India, en las que la evangelización sí que ha tenido éxito a pesar de las dificultades.

Al final de las reuniones, los organizadores elaborarán un documento con propuestas. El 26 de octubre, las votarán una a una, y las entregarán al Papa que decidirá si aplicarlas o no.