En el cuarto domingo de Pascua, el del Buen Pastor, Francisco explicó que Jesús siempre guía a los cristianos por el camino correcto. Dijo que a veces se racionaliza tanto la fe, que se pierde su verdadera esencia.
Tras el Regina Coeli pidió a todos los peregrinos que rezaran el Rosario por la paz, también con motivo de su próximo viaje a Fátima.
Recordó también al misionero español Antonio Hortigüela y a sus seis compañeros, beatificados pocas horas antes y dijo que eran "símbolos de la persecución religiosa”.