Durante el rezo del Ángelus, el Papa habló de la salvación divina y de la misericordia. Pidió a los cristianos que tomen en serio la salvación y que se esfuercen por atravesar la puerta que conduce a ella.
FRANCISCO:
"Es una puerta estrecha no porque sea opresiva sino porque nos pide contener y limitar nuestro orgullo y nuestro miedo para abrirnos con corazón humilde y confiado a Él, reconociéndonos pecadores, necesitados de su perdón”.
En el momento de los saludos, el Papa quiso recordar a las víctimas del ataque terrorista que tuvo lugar el sábado por la noche en Turquía.
Más de 50 personas murieron y un centenar resultaron heridas durante el atentado. Estaban celebrando una fiesta de bodas.