El Papa Francisco clausura este domingo 28 de octubre, el sínodo sobre los jóvenes y la vocación. Este sínodo tiene como consecuencia, más que indicaciones concretas, una nueva actitud más activa y acogedora hacia los jóvenes. Tanto en el lenguaje como en las formas. La idea del sínodo es que ellos no son el futuro de la Iglesia sino el presente.