La Hermana Emmanuela Edwards, junto a las Misioneras de la Divina Revelación, es una monja que está transformando el lenguaje del arte en lenguaje de fe.
Ella y el resto de su orden muestran la belleza de Dios a los peregrinos en Roma. Lo hacen como guías de los Museos Vaticanos. Se las conoce como las 'monjas verdes' por el color de su hábito. Dicen que el arte llega a un lugar en el que no existe la racionalidad y ahí es dónde la fe puede echar raices.