El Patriarca Greco-Ortodoxo de Jerusalén, Teófilo III, y el Papa Francisco se saludaron en el Vaticano. Teófilo III devuelve así al Papa Francisco la visita que este hizo en 2014 a Tierra Santa.
Esta visita del Patriarca es un signo del cada vez mayor entendimiento entre las Iglesias cristianas de Tierra Santa. Francisco también lamentó la inestable situación en Tierra Santa, especialmente de Jerusalén, ciudad cuyo Status Quo debe ser respetado. Por eso, el Papa pidió que se favorezcan las condiciones para que se dé una paz estable, basada en el respeto a los derechos de todos. De esta forma, habrá seguridad y ningún habitante de la Tierra Santa se verá obligado a marcharse para poder vivir en paz.