El Papa ha ido por sorpresa a un asilo de las afueras de Roma en el que viven 33 ancianos, luego de camino hacia el Vaticano, se ha detenido en una casa que atiende a seis personas en estado vegetativo y a sus familiares.
Este es otro de los "gestos de misericordia” que el Papa tiene previsto ir realizando cada mes durante el Jubileo.