La situación humanitaria ha ido a peor desde que comenzó el conflicto al este de Ucrania. Diez mil personas han sido desplazadas tras la anexión rusa de Crimea.
A día de hoy hay más de 1 millón de personas que han tenido que abandonar sus casas por la violencia.
En febrero se firmó un alto el fuego, pero la violencia continúa. Mientras el país se desangra por la guerra, Cáritas Ucrania pide ayuda.