Barack Obama y su esposa Michelle recibieron al Papa Francisco en una colorida y musical ceremonia de bienvenida.
En su discurso, el presidente de los Estados Unidos elogió al Papa por su ejemplo y a la Iglesia católica por la contribución que hace a la sociedad americana.
El Papa, por su parte, elogió el papel de los inmigrantes en Estados Unidos por ser un colectivo clave en la construcción del país. Dijo que en su visita al Congreso pensaba en subrayar esta característica tan originaria del pueblo de norteamérica.
También habló del cambio climático y del restablecimiento de las relaciones diplomáticas con la vecina Cuba. Destacó la importancia de impulsar y proteger al matrimonio y la familia y promover una sociedad más justa, el firme deseo, señaló el Papa, de los católicos de América.