Toda la vida de Cristo en la tierra ha sido un estar junto a los hombres para mostrarles su compasión. Este fue el mensaje que el Papa lanzó durante la soleada audiencia general en la plaza de San Pedro.
Dijo que Dios, siendo perfecto, quiso ponerse en la fila de los pecadores para que no teman confesar sus culpas. A diferencia de los hombres él no juzga, sino que perdona...
El Papa había concluido la semana pasada un ciclo de catequesis dedicado a explicar la misericordia en el Antiguo Testamento. A partir de esta audiencia general inicia uno centrado en el Nuevo Testamento.