TEMAS
-Homilía del Papa en casa Santa Marta: jueves 18 de septiembre

Texto completo, para copiar e imprimir, de la homilía del Papa - jueves 18 de septiembre, 2014 - ***** La liturgia del día presenta el Evangelio de la pecadora que lava los pies de Jesús con sus lágrimas y los rocía con perfume, secándolos sus cabellos. Jesús es invitado a casa de un fariseo, “una persona de cierto nivel, de cultura” – afirmó el Papa – que “quería escuchar a Jesús”, su doctrina, quería saber más. Y juzga dentro suyo tanto a la pecadora como a Jesús porque “si fuera un profeta sabría quién es y de qué clase es la mujer que lo toca”. “Non era malo”, pero “no logra entender aquel gesto de la mujer”:
“No logra comprender los gestos elementales: los gestos elementales de la gente. Quizá este hombre había olvidado cómo se acaricia a un niño, como se consuela a una abuela. En sus teorías, en sus pensamientos, en su vida de gobierno – porque tal vez era un consejero de los fariseos – había olvidado los gestos elementales de la vida, los primeros gestos que todos nosotros, recién nacidos, hemos comenzado a recibir de nuestros padres”.
Jesús – subrayó Francisco – reprocha al fariseo “con humildad y ternura”: “Su paciencia, su amor, las ganas de salvar a todos” lo lleva a explicarle lo que ha hecho la mujer y qué gestos de cortesía no ha tenido él. Y entre las murmuraciones escandalizadas de todos, dice a la mujer: “¡Tus pecados son perdonados!”. “Vete en paz, ¡tu fe te ha salvado!”:
“La palabra salvación– ‘Tu fe te ha salvado’ – la dice sólo a la mujer, que es una pecadora. Y lo dice porque ella ha logrado llorar sus pecados, confesar sus pecados, decir: ‘Yo soy una pecadora’, a decírselo a sí misma. No lo dice a aquella gente, que no era mala: ellos no se creían pecadores. Pecadores eran los demás: los publicanos, las prostitutas… Esos eran pecadores. Jesús dice esta palabra – ‘Tú estás salvado, tú estás salvada, te has salvado’– sólo a quien sabe abrir el corazón y reconocerse pecador. La salvación sólo entra en el corazón y cuando nosotros abrimos el corazón en la verdad de nuestros pecados”.
“El lugar privilegiado del encuentro con Jesucristo – recordó el Papa – son los propios pecados”. Esto parece una “herejía – observó Francisco – pero también lo decía San Pablo” que se vanagloriaba sólo de dos cosas: de sus pecados y de Cristo Resucitado que lo ha salvado:
“Y por reconocer nuestros propios pecados, reconocer nuestra miseria, reconocer lo que nosotros somos y lo que somos capaces de hacer o hemos hecho es, precisamente la puerta que se abre a la caricia de Jesús, al perdón de Jesús, a la Palabra de Jesús ‘¡Vete en paz, tu fe te salva!’, porque has sido valeroso, has sido valerosa al abrir tu corazón a Aquel que sólo puede salvarte”.
Jesús dice a los hipócritas: “Las prostitutas y los publicanos los precederán en el Reino de los Cielos”. “¡Es fuerte esto!” – concluyó diciendo el Papa Francisco – porque cuantos se sienten pecadores “abren su corazón en la confesión de los pecados, al encuentro con Jesús, que ha dado su sangre por todos nosotros”.
(María Fernanda Bernasconi – RV).

 

Suscripción al boletín informativo

Si desea recibir información sobre las últimas novedades de la programación de Nazaret TV, envíe los siguientes datos:

Hemos recibido su petición de suscripción correctamente. En breve recibirá un correo electrónico para confirmarla.

Error

Suscripción al boletín informativo

Gracias, su suscripción ha sido confirmada. Pronto empezará a recibir nuestros boletines.