El monasterio de san Juan de la Peña, en España, está cubierto por la enorme roca que le da nombre, el conjunto, abarca una amplia cronología que se inicia en el siglo X. En su interior destacan la iglesia prerrománica, las pinturas de San Cosme y San Damián, del siglo XII, el denominado Panteón de Nobles, la iglesia superior, consagrada en 1094, y la capilla gótica de San Victorián, pero sobre todo sobresale el magnífico claustro románico, obra de dos talleres diferentes. A todo ello hay que sumar otros edificios posteriores a los siglos medievales, entre los que cabe señalar el Panteón Real, de estilo neoclásico, erigido en el último tercio del siglo XVIII.
Considerado por la tradición como la cuna del Reino de Aragón, fue parada habitual del Camino de Santiago y lugar que custodió el Santo Grial...