En la mañana del 20 de octubre de 2018 tuvo lugar en la Catedral de Málaga (España) la ceremonia de Beatificación del sacerdote jesuita Tiburcio Arnaiz Muñoz. La celebración fue presidida por el Cardenal Angelo Becciu, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.
Fundador de las Misioneras Doctrinales Rurales, el padre Tiburcio dio testimonio de santidad por su entrega continua hacia todas las personas, en especial hacia los pobres, y por convertirse en director de Ejercicios Espirituales, confesor y director de almas. El lema que siempre le caracterizó fue: “buscad no vuestros intereses, sino los de Jesucristo”.